miércoles, 8 de febrero de 2012

Vendedores de humo

Para mezclar la verdad con mentira se requieren las virtudes de un buen quimico


Olga Díaz Mora
Santo Domingo
El estilo de participar en pareja casi había quedado reservado al ámbito de la lucha libre, como era el caso de la archiconocida pareja de luchadores Los Broncos. También se ve en ocasiones en el mundo hípico, donde dos caballos suelen correr “enllavados” para defender los colores de su establo.

Sin embargo, comenzando el año encontramos que dos colegas economistas, tradicionales “vendedores de humo”, recurren ahora a esta modalidad para pretender sostenerse en pie e intentar recobrar la pérdida acelerada de su credibilidad ante la opinión pública. Y las razones son obvias: se han pasado los últimos siete años pronosticando el descalabro de la economía del país. No acaban de comprender que para aprender a mezclar la verdad con la mentira, se requieren las mismas virtudes de un buen químico.
El pasado lunes 30 de enero, leímos con sorpresa que el segundo de esos dos economistas, el amigo colega y antiguo compañero de trabajo el Dr. Arturo Martínez Moya, en un artículo publicado en el periódico Hoy titulado “Crecimiento 2011”, se despacha a sus anchas, pero siempre recurriendo al mismo método de mezclar la verdad con la mentira. En esta ocasión el autor asumió el papel de abogado de la defensa de PIBnocho, y al mismo tiempo intenta responder nuestro artículo “Fábula Económica de un Gran PIBnocho”, publicado en el Listín Diario el pasado 19 de enero. 
Como todo un pavo real, llega hasta a calificarnos de “soberbia”, al extremo de considerarse “Consejero” para recomendarnos ser menos “arrogante” al hablar del crecimiento económico del país, llegando al atrevimiento de aconsejar a las autoridades del Banco Central “que procedan con prudencia, tolerancia y menos agresivos” en las respuestas con relación al PIB.
Los artículos de PIBnocho 
¡Tal parece que por el hecho de defender los resultados económicos que publica nuestra entidad, con argumentos técnicos sólidos e irrefutables, para rebatir afirmaciones peregrinas, les da el derecho para calificarnos de soberbia y arrogante! 
Sin embargo, este colega parece que no se ha percatado que donde se anidan la arrogancia y el cinismo es precisamente en los artículos de PIBnocho, dedicados a cuestionar sistemáticamente todo lo concerniente al crecimiento de nuestra economía, siempre creyéndose que es dueño de la verdad absoluta, lo cual no se corresponde con la realidad, tal y como lo hemos demostrado en nuestro primer artículo. 
Además de que en muchas ocasiones, PIBnocho, de forma irrespetuosa, tilda de mentiroso no sólo al Banco Central, sino también al propio Presidente de la República, que en su condición de Primer Mandatario de la Nación merece el respeto de todos los ciudadanos.
Queremos expresarle al segundo economista, que ardorosamente ha asumido la defensa del primero, que lo único que hicimos en nuestro artículo al contestarle a PIBnocho fue utilizar su mismo lenguaje. Por tanto, es a Pibnocho a quien este abogado debería “aconsejar” para que entienda que todos somos parte de un conglomerado de profesionales, que aunque tengamos diferencias de opinión, debemos conservar la cordialidad, la decencia y las buenas costumbres.
Sin embargo queremos reiterar lo que dijimos en nuestro artículo anterior, pues, durante todo el pasado año, tuvimos la paciencia y resistimos estoicamente, contemplar las tantas y tantas declaraciones de PIBnocho, repitiendo constantemente la misma letanía: que si las ventas de la DGII crecían en tal magnitud y por tanto el crecimiento del PIB real no se correspondía con dichas ventas; que ese crecimiento estaba infl ado; que los resultados del PIB son irreales;… que no reflejan la realidad actual, recurriendo siempre al cinismo y a la burla, bla,bla,bla, etc.,etc. Y como dice el refrán: “tanto da la gota en la piedra hasta que le hace un hoyo”. Y sobre todo, teniendo pleno conocimiento de que todo lo que planteaba PIBnocho en sus artículos carecia de sustentación económica, y en su gran mayoría respondían a “supuestos y percepciones”.
En nuestra condición de funcionaria del Banco Central, nos sentimos en el deber de edifi car correctamente a la opinión pública y evitar que estos cuestionamientos siguieran sembrando dudas en la población sobre la veracidad del crecimiento económico dominicano.
Es por ello que tratamos de presentar en forma clara y contundente un sinnúmero de estadísticas económicas que el Banco Central requiere para calcular el Producto Interno Bruto (PIB), buscando demostrar que los reportes de ventas de las empresas formales a la DGII de ninguna manera podían coincidir con el crecimiento económico.
Metodos de medición 
No obstante, quiero externar mi agradecimiento al abogado defensor, pues con la explicación técnica que hizo en su artículo sobre los tres métodos de medición del PIB, completa, corrobora y fortalece aún más mis argumentaciones sobre la complicada y estricta metodología de cálculo del PIB.
Contrario a lo que plantea este economista sobre las desigualdades, que según su “percepción” deberían existir en la medición del PIB por los tres métodos, quiero aclararle que, por defi nición, son igualdades que deben cumplirse, ya que el PIB calculado por el lado de la producción debe ser igual a la medición por el lado de los ingresos y también debe cuadrar por el lado del gasto o utilización.
Con su explicación lo que queda demostrado es que los tratamientos metodológicos de las cuentas nacionales son complejos y requieren de un sinnúmero de estadísticas económicas, como las que enumeré en mi artículo, para calcular el PIB por los tres métodos y que en ningún caso, el crecimiento económico debe coincidir con las ventas de las empresas formales reportadas.
Sin embargo, contrario a las afirmaciones contenidas en el artículo de este abogado defensor, mal infundadas por cierto, de que “el cálculo del PIB es un acto de fe, es una carpintería novelada porque intervienen datos reales y de creación, aproximación, conjeturas”, etc. Si fuera así, de qué serviría que las naciones se esmeren en calcular rigurosamente las cuentas nacionales, para hacer comparaciones e interrelaciones de variables y usarlas en sus decisiones de políticas, además de utilizarlas a nivel internacional para concertar acuerdos y obtener financiamientos, entre otros beneficios. 
La verdad es que resulta sorprendente que el referido colega y ahora defensor de PIBnocho y quien fuera alto funcionario del Departamento de Estudios Económicos de esta institución, donde precisamente siempre se han elaborado las cuentas nacionales, no supo aprovechar esa oportunidad para conocer a fondo las cuentas nacionales y el alcance de su medición.
Aunque los cálculos de las cuentas nacionales menos complejos cuando este economista laboraba en el Banco Central, le puedo asegurar que en las últimas dos décadas, la medición del PIB utilizando el Sistema de Cuentas Nacionales SCN1993 ha experimentado un proceso de transformación signifi cativo, que implica disponer de informaciones cada vez más detalladas y sofi sticadas, para que se cumpla la igualdad por los tres métodos de medición.
Cuentas nacionales 
Cabe destacar en este punto, que los organismos especializados en su medición, vale decir Naciones Unidas, CEPAL y Fondo Monetario Internacional, vienen desarrollando una serie de iniciativas de armonización a nivel de la región latinoamericana, en materia de cuentas nacionales, balanza de pagos, estadísticas financieras, mercado laboral, precios, entre otras, con la fi nalidad de que los países armonicen los tratamientos metodológicos en cada una de estas áreas y presenten estadísticas comparables a nivel internacional. 
La República Dominicana, está participando, a través de diferentes foros internacionales en todas estas iniciativas, por lo que mantiene un proceso de mejoramiento y actualización permanente de las estadísticas económicas, especialmente las que elabora el Banco Central.
Para finalizar, quiero aprovechar este artículo, para informarle a toda la nación que en el próximo mes de marzo el Banco Central celebrará un Seminario con la participación de expertos internacionales en Cuentas Nacionales de Naciones Unidas y del FMI, para presentar los resultados preliminares del cambio de año base de las Cuentas Nacionales, siendo seleccionado el año 2007 como año base, por ser un año estable y en el cual se había consolidado el proceso de recuperación económica previo a la crisis económica 2003-2004. Este cambio de año base dotará a los agentes económicos de una estructura productiva más actualizada y detallada sobre la realidad económica nacional.
La autora es Asesora Económica de la Gobernación del Banco Central de la República Dominicana.

No hay comentarios:

Publicar un comentario